O Salnés predica con el ejemplo y festeja el Día del Libro.
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Cuentacuentos, conferencias, obsequios, mercadillo y el relax centraron los actos.
Cuentacuentos, conferencias, obsequios, mercadillo y el relax centraron los actos.
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El 23 de abril fue en su día una fecha luctuosa para la literatura universal. En 1616 se murieron, a muchos kilómetros de distancia, dos de las más grandes figuras de todos los tiempos: Miguel de Cervantes y William Shakespeare. Hoy por hoy esa fecha es la escogida para celebrar el Día del Libro y por ello los actos de ayer han sido diferenciados y numerosos.La comarca de O Salnés se ha querido volcar, como cada año, con este festejo y cada vez las formas de rendir tributo son más sofisticadas e ingeniosas. En Vilagarcía hubo animación matutina en la biblioteca municipal. Cuentacuentos para los escolares, fomento de la lectura, conferencias en los centros educativos y la presentación de la obra Theatralia, del cronista oficial de Vilanova, Xosé Lois Vila Fariña, en la antigua ferretería de Sobrino, bajo la organización de Afasal.
Pero si hubo un acto diferente en la ciudad fue el de la librería Nobel, que acogió la iniciativa estrenada el pasado año de la Bodega Rías Baixas. Los clientes que celebraron la fiesta de las letras comprando libros se fueron con las maños llenas y con la vinoteca más enriquecida, gracias a las botellas del albariño Rosalía de Castro.
Cambados
En la villa del albariño, se llevó a cabo un maratón de lectura en el auditorio municipal. El eje central era Ramón Cabanillas, que puso la parte clásica. Para la moderna estuvo la grabación en formato audiovisual de todas las lecturas realizadas, así como la ambientación del escenario como el paseo de la Calzada. Por la tarde, la actividad estrella fue la del extraterrestre Orbil - «libro» al revés- que contó las magnificencias de su planeta a través de los cuentos de Andersen.
Vilanova de Arousa
Los pequeños lectores vilanovenses tuvieron ayer una agenda, cuando menos, apretada. Se organizó un mercadillo de intercambio de libros y cuentacuentos. Esta última atracción contó con cuatro grandes áreas. Un cuento gigante, con teatrillo incorporado donde se escenificaron los pasajes de la obra, improvisaciones sobre grandes fábulas, la caja de los cuentos (donde los niños tienen que identificar un elemento diferenciador de cada obra) y un taller de teatro.
Catoira y A Illa
Todos los usuarios de la biblioteca recibieron ayer, como obsequio, un libro en Catoira, mientras en A Illa hubo una cita singular. El jardín de las inmediaciones de la biblioteca municipal modificó su habitual estampa para convertirse en un lugar de relax y lectura. Las hamacas que lucen en los arenales isleños durante la temporada estival coparon el interior, junto a las sombrillas, para que todos, padres e hijos, disfrutasen del buen tiempo y de la lectura relajada de libros, cuentos y revistas. Esta noche, los más pequeños la pasarán en la biblioteca municipal.
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La librería vilagarciana Nobel vendió libros y repartió vino.
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La Voz de Galicia 24/04/2009
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